Nota. En este articulo solo nos referiremos a las grandes señales que el cielo nos envía con el fin de alertarnos y prepararnos con su gracia a estos grandes acontecimientos muchos de los cuales ya están presentes, pero no nos resignamos a verlos como señales verdaderas del gran castigo que le espera a la humanidad en estos momentos. Son, a la vez, señales que nos dan una cierta explicación de muchas interrogantes que nos hacemos ante el descontrol inmenso del mundo actual. Finalmente, si las sabemos comprender nos preparemos convenientemente para lo que disponga Nuestro Señor Jesucristo de nosotros. No es la intención del autor del presente articulo explayarse en cada uno de los temas que trata sino dar un, a vuelo de águila, de lo que paso y pasa en el mundo. Todo comentario sobre el actual articulo por que sea con respeto y con el fin de enriquecer aún más este artículo, gracias.
A) la abominación de la desolación en el
lugar santo. Nuestro Señor Jesucristo usa mucho la figura y la realidad para
que quede claro lo que nos quiere trasmitir en tono profético. En los
Evangelios nos habla de esta abominación de la desolación utilizando como
figura la ciudad de Jerusalén como su templo, ¿Cómo se llegó a ella? La pasión
de Jesucristo juntamente con su muerte trae a nuestra consideración dos cosas:
la maldición que, sobre si, pidieron los judíos cuando dijeron impíamente, “¡La sangre de ÉL, sobre nosotros y sobre nuestros hijos!”
(S, Mat. XXVII, 25) ellos mismos llamaron la maldición de Dios sobre
ellos y su descendencia, solo faltaba que esta alianza se rompiera la cual se
consumo cuando Jesucristo Señor Nuestro expiro en la cruz inmediatamente el
velo del templo se rompió, sobre esto nos dice san Mateo: “Y he ahí que el velo del templo se rasgo en dos, de
arriba abajo”. (Sn. Mat. XXVIII. 51) Dando a entender que se rompía la
alianza del pueblo judío con Dios y dando fin a los sacrificios de la ley mosaica,
solo faltaba la destrucción de Jerusalén, del templo y la segunda es la
diáspora judía profetizada por Él mismo con estas palabras: “Mas cuando veáis
a Jerusalén cercada por ejércitos, sabed que su desolación esta próxima.
Entonces, los que están en Judea, huyan a las montañas…” (San Lc. XXI. 20-24) esta profecía terrible se
realizó por el ejército romano bajo las ordenes de Tito, en el año 70 después
de Cristo. Flavio Josefo, con lujo de detalles, nos narra la caída de Jerusalén
y la destrucción total del templo.
B) La segunda abominación de la desolación ya
no es figura sino realidad y se da en el año 1960 con la apertura del Concilio
Vaticano II. Sus reformas contrarias al espíritu de la tradición bimilenaria de
la Iglesia consumo esta segunda abominación de la desolación que cayó como una
demoledora sobre el orbe católico.
Es difícil enumerar los terribles desastres y errores
que ella ha causado, sin embargo, podemos escribir aquellas que nos son
notorias aquí, en todas partes y en el mundo.
a) El cambio de rito de la Misa. Antes de
decía en latín o rito latino por el cual la Iglesia era una. Ahora se dice en
lengua vernácula (ya que en lengua vernácula, según dicen los reformadores, el
fiel entiende mejor la misa), cara al pueblo y de espaldas a Dios. Donde se ven
con claridad dos cosas tristes; el centro de estas misas ya no es Dios y el
pueblo toma su lugar.
b) si la Misa se da de espaldas a Dios el
tabernáculo, que estaba en el centro de todo altar tradicional, ahora estorba y
es inapropiado, por lo tanto, se debe quitar del centro y enviarlo a no sé dónde,
con tal de que no estorbe.
c) Se eliminaron la mayor parte de las
genuflexiones que en la Misa tridentina o en latín que se hacían y se dejaron
solo algunas. ¿Dónde quedo la fe del sacerdote oficiante ante la presencia real
y sacramental de Nuestro Señor Jesucristo? ¿No es acaso una desacralización de
lo santo?
d) La comunión se da de pie y en muchos casos
en la mano, en pocos se da de pie y en la boca, ¿Qué es esto, no es ir contra
la sana costumbre de recibir de rodillas a Jesucristo Rey y Señor de todo lo
creado, además de nuestro Redentor que es Dios y hombre por excelencia? ¡Otro
acto de desacralización!
e) La desaparición total de la música sacra en
especial del canto gregoriano que fueron suplidos por música no sacra y hasta
vulgar. Ahora los mariachis, las bandas, el folklore popular y otras músicas profanas
son permitidos en las misas.
Dijo Jesucristo: “El árbol bueno da frutos
buenos y el árbol malo da frutos malos, no puede el árbol bueno dar frutos
malos ni el árbol malo dar frutos buenos. Por sus frutos los conoceréis” ya he
enumerado varios frutos malos de este árbol malo. Dice un adagio latino: “Nadie
da lo que no tiene” y lo que menos tiene esta misa es la santidad, con esto
queda dicho todo sobre este tema. A estas señales le sigue otra aún más fuerte.
C) Dentro de la Iglesia
estará presente el espíritu de apostasía e irreligión y de rebelión de que
habla San Pablo en su segunda carta a los Tesalonicenses donde nos comenta:
¨Nadie os engañe en manera alguna, porque primero debe venir la apostasía y
hacerse manifiesto el hombre de iniquidad, el hijo de perdición; el adversario,
el que se ensalza sobre todo lo que se llama Dios o sagrado, hasta sentarse en
el templo de Dios¨ (2, 3). En cuanto a este tema, hoy es más palpable este
espíritu de apostasía debido no solo al libre pensamiento sino también al
modernismo hereje profesado por los mismos jerarcas de la Iglesia, ¿Cuántos no
han apostatado de ella desde 1965 a la fecha? ¿Cuántos no han abandonado a la
Iglesia gracias a este modernismo apostata y ateo? Solo Dios lo sabe, pero
nadie puede negar que estamos viviendo una profunda crisis de fe y una
confusión terrible. En donde el que, por gracia de Dios conserve su fe, se verá
presa de esta gran confusión y su espíritu se acongojara sufriendo, de ser
posible, un martirio moral permanente sin encontrar una luz, en medio de esta
gravísima oscuridad.
D) Los gobernantes civiles tendrán todos un
mismo plan, que será abolir y hacer desaparecer todo principio religioso, para
dar lugar al materialismo, al ateísmo, al espiritismo y a toda clase de vicios.
Actualmente, no existe en el mundo un solo gobierno que sea católico todos se
han laicizado y todos a uno compiten por abolir no solo la religión católica
sino también a Dios de la sociedad que otrora era católica. Por desgracia vemos
que sus esfuerzos no son en vano ya que el orbe católico ya no lo, es más. Los
valores espirituales y morales han desaparecido y eso ha provocado que el dique
de la inmoralidad en todos los ámbitos se haya derramado dejando hediondas
todas las capaz de la sociedad en todo el mundo.
E) Los libros malos abundarán sobre la tierra y
los espíritus de las tinieblas extenderán por todas partes un relajamiento
universal en todo lo relativo al servicio de Dios y obtendrán poder
extraordinario sobre la naturaleza: habrá iglesias para servir a esos
espíritus. (EL SATANISMO) Algunas personas serán trasladadas de un lugar a otro
por esos espíritus malvados, incluso sacerdotes, por no seguir el buen espíritu
del Evangelio, que es espíritu de humildad, de caridad y de celo por la gloria
de Dios. Nadie, en su sano juicio, niega la existencia masiva de la prensa mal
sana que, por otro lado, avala los esfuerzos de los malos gobernantes cuyo fin
ya lo vimos, ¡Descristianizar a la humanidad!
F)
Se oirán voces o rumores acerca de la próxima venida de Cristo, de los cuales
dijo el mismo Cristo Jesús: “Entonces si alguno os dijere: aquí está el
Cristo o allí, no lo creáis; porque se levantarán falsos Cristos y falsos
profetas, y darán grandes señales y harán prodigios, de suerte que engañarán,
si es posible, aun a los mismos escogidos. Así, que si os dijeren: He aquí que
en el desierto está, no lo creáis; he aquí que está en los recintos, no lo
creáis. Porque como el relámpago sale del Oriente y se muestra hasta el
Occidente, así será también la venida del Hijo del hombre.” (Mt. 24,
23-26; Mc. 21. 22; Lc. 17, 23-24).
G)
Dice Nuestro Señor Jesucristo, en esta otra señal: “Oiréis también hablar de guerras y rumores de guerra. ¡Mirad que no os
turbéis! Esto, en efecto, debe suceder, pero no es todavía el fin” … (San
Mt. XXV. 6-8) Podrían objetarme tranquilamente, ¿Pero siempre ha habido guerras
desde la muerte de Nuestro Señor Jesucristo hasta la fecha? Es verdad, pero
distingamos muy bien dos cosas dentro de este apartado; en las guerras pasadas
hasta la II Guerra Mundial la Fe y la Religión han permanecido muy unidas en el
orbe católico y no se ha dicho, “pero no es todavía el fin” ya que a estas
palabras le preceden necesariamente los signos de los últimos tiempos ya
anotados anteriormente. Admito que no he anotado todos dado que unos son o
corresponden al gran castigo y no a la Parusía.
Aclarado
lo anterior, demos un breve repaso al estado actual de la humanidad en cuanto a
las guerras o frentes de batalla que ya están abiertos y otros tantos que se
pueden abrir, quien los ignore vive en una burbuja que tarde o temprano le
estallara mostrándole la cruda realidad.
1)
La guerra entre Rusia y Ucrania. (En realidad es una guerra entre la O.T.A.N.
comandada por Estados Unidos en el territorio de Ucrania) Ésta inicio a finales
de 2021 y sigue su curso en la actualidad aumentando, cada día, su intensidad
puede llegar, incluso, a una guerra nuclear y, ¿Quién nos salvara de una
catástrofe semejante a esta, si es el mismo Dios quien la azuza? No olvidemos
lo que Nuestra Señora dijo en Fátima, por las dudas les pongo la cita salida de
las mismas palabras de la Virgen Santísima: “Para impedir eso vendré a pedir
la consagración de Rusia a mi Corazón Inmaculado y la comunión reparadora de
los primeros sábados. Si se escuchan mis peticiones, Rusia se convertirá y se
tendrá la paz. Si no, ella (Rusia) propagará sus errores por el mundo,
provocando guerras y persecuciones contra la Iglesia; los buenos serán
martirizados; el Santo Padre tendrá mucho que sufrir; varias naciones serán
aniquiladas.” ¿Qué opináis ahora? Esta nación cuenta con el mayor
arsenal del mundo superando ampliamente a Estados Unidos y, por los vistos, con
la anuencia de Dios quien es el que en definitiva gobierna el mundo realmente.
Los demonios y los hombres, por muy poderosos que sean no hacen sino la
voluntad de Dios, quieran o no quieran.
2)
El conflicto entre China continental y Taiwán. Es algo de larga data en donde
los Estaos Unidos junto con la O.T.A.N. su vasallo, unidos a Japón y Corea del
sur están echando leña a un conflicto que puede estallar en cualquier momento. Aun
sabiendo que China tiene el mayor ejercito del mundo, modernizado y
actualizado, además es la tercera potencia nuclear del mundo pues ya desplazo a
Francia, seria una locura despertar al dragón que colabora muy estrechamente
con el Oso ruso y no permitirán, bajo ningún concepto, que Taiwán se
independice, como lo quieren estas otras naciones. El dragón aparece en el
Apocalipsis de San Juan cap. 13.
3)
Los recientes golpes de estado llevados a cabo en Niger y Gabón, ¿qué atrás de
ellos este Rusia, quien lo puede negar o afirmar? No me atrevo a confirmar lo
uno u lo otro, el tiempo nos lo dirá. Lo innegable de este asunto es la
realidad de estos dos golpes militares.
4)
La actual confrontación entre Israel e Irán en Medio Oriente.
5)
Finalmente, tenemos el conflicto latente desde 1950 entre las dos Coreas, la
del norte y la del sur. La una defendida por China y Rusia, la otra por Estados
Unidos sus lacayos de la O.T.A.N. y probablemente Japón. No quiero alargarme
mas en este tema, pero es bueno sacar una conclusión sobre estos cuatro
acontecimientos de guerras que, necesariamente, afectaran al mundo de forma
dramática y desastrosa. Quizá el principio de los dolores ya comenzó desde 2022 entre Rusia y la O.T.A.N. porque Ucrania solo presta su nación como campo de
batalla y en donde la cantidad de muertos se acerca al 1,000,000.00 de muertos tanto de
Ucrania como de Rusia, aunque Ucrania sola llegue a esa cantidad de muertos sin
contar las bajas rusas. Por falta de espacio y para no saturarlos me quedo aquí,
cada quien saque su conclusión.
Como siempre Reverendo Padre Arturo, muy interesante , y verdadero..DIOS Y MARIA SANTISIMA LO Acompañen Y PROTEJAN.. BENDECIDA NOCHE.
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