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martes, 5 de abril de 2016

LA EXISTENCIA DE DIOS - ROYO MARÍN


CAPITULO 2


SI PUEDE DEMOSTRARSE LA EXISTENCIA DE DIOS

6.-1. Estado de la cuestn.

Se trata de saber si la existencia de Dios, que, como acabamos de
ver,
no es evidente con relación a nosotros, puede ser demostrada con certeza por la simple razón natural, aun prescindiendo de las luces de la fe.

7.-2.Errores.

Los principales errores que en el transcurso de los siglos han ido apareciendo en torno a esta cuestión son los siguientes:


EL AGNOSTICISMO

niega la aptitud de la inteligencia humana para conocer las verdades suprasensibles, principalmente la de Dios. Presenta múltiples formas:


a)  EL POSITIVISMO

No admite como objeto de ciencia sino los hechos del conocimiento sensible externo e interno y su coherencia según determinadas leyes. La existencia de las causas suprasensibles, principalmente la existencia de Dios, es del todo incierta.

b)   EL CRITICISMO de Kant

afirma que el objeto de la facultad cognoscitiva -llamada razón teórica- lo constituyen únicamente los fenómenos sensibles. Las cosa que exceden los sentidos no pueden ser alcanzadas por la razón. Según Kant, la existencia de Dios en el orden t- rico no puede afirmarse ni negarse; pero es un postulado de la razón práctica exigido por la vida moral con el fin de establecer la debida proporción entre el mérito y la recompensa de las buenas obras.


e) EL PRAGMATISMO de W. James

Mide a la verdad por su mera utilidad práctica. No podemos juzgar en teoría si
Dios existe, pero es una verdad práctica, puesto que tenemos necesidad de El.

d) EL SENTIMENTALISMO

afirma que la existencia de Dios, más que demostrarse, se siente, ya sea mediante una facultad instintiva o sentido común (Reid), ya con un
sentido interno y afecto del corazón (Jacobi), ya con la intuición del corazón y el sentido religioso (modernistas, inmanentistas y pseudornísticos).


e) EL EXISTENCIALISMO

Rechaza las esencias inmutables de las cosas y se preocupa únicamente de la existencia personal de cada uno. No puede compaginarse con el dogma católico, ya se trate del existencialismo ateo, ya  del que niega el valor del raciocinio metafísico.

EL TRADICIONALISMO

Incide en el error por caminos distintos, exagerando el elemento sobrenatural en perjuicio de las fuerzas de la razón. Enseña que la revelación divina se requiere necesariamente para el conocimiento cierto de Dios. La idea de Dios, procedente de la revelación primitiva, la recibimos de nuestros padres y se nos transmite por tradición oral. La Iglesia ha rechazado estos errores (cf. D. 1622ss; 1649ss; 1785ss; 1806), que fueron patrocinados por Bonald, Lamennais, Bautain, Bonnety, Ventura, etc. Con el tradicionalismo hacen coro, aunque con diversos matices, muchos protestantes y jansenistas.

3. Doctrina católica. Las recogen las siguientes conclusiones:

Conclusión la: La existencia de Dios no puede demostrarse por ningún argumento "a priori". (Completamente cierta).


8.-La razón es sencillísima. Demostración "a priori" es aquella que demuestra alguna cosa por sus causas. Por lo mismo, afecta únicamente a los efectos. Ahora bien: Dios no es efecto de nadie, ya que, como veremos, es la Causa Primera de todo cuanto existe. Luego es imposible demostrar la existencia de Dios por ningún argumento "a priori".


Conclusión 2":

Tampoco puede demostrarse su existencia real por el llamado argumento ontológico o "a simultaneo". (Doctrina común Y cierta en teología).


9.- El llamado argumento ontológico, pro- puesto por San Anselmo, fue repetido, con distintos matices, por Descartes, Leibnitz y otros filósofos. He aquí las tres principales formulaciones:


SAN ANSELMO.

Todos los hombres cuando hablan de Dios quieren expresar bajo este nombre el ser más perfecto que se puede pensar o imaginar. Ahora bien: si éste ser careciera de existencia no sería el más perfecto que se puede pensar o imaginar, porque cualquier ser existente, por el mero hecho de existir, ya sería más perfecto que él. Luego en el concepto mismo de Dios está implicada su existencia real. Cualquiera que entienda bien lo que significa la palabra "Dios" deducirá inmediatamente su existencia real. Por consiguiente, la existencia de Dios es evidente para todos los hombres; sólo el necio puede decir "no hay Dios'".


DESCARTES. Tenemos idea clara de un Ser infinito al que llamamos Dios. Ahora bien: esta idea incluye forzosamente la existencia real de ese Ser, porque el ser no-existente no puede llamarse infinito. Luego Dios, Ser infinito, existe realmente.


LEIBNITZ. Concebimos perfectamente que la existencia de Dios es posible; pero si de hecho no existiera, no sea posible que existiese jamás, ya que a Dios nadie puede crearle. Luego Dios existe realmente.


CRÍTICA. Estos argumentos, al parecer tan claros, y sencillos, son, sin embargo, inadmisibles. Hay en ellos un tránsito ilegítimo del orden ideal al real. Partiendo de una idea no se puede llegar sino a otra idea; la existencia ideal de Dios. Para demostrar la existencia real de Dios es preciso partir de las cosas reales, con el fin de ascender, por vía de rigurosa causalidad, hasta la Causa Primera que las ha creado todas.


Conclusión 3": La razón humana puede demostrar con toda certeza la existencia de Dios Creador y Señor de todo cuanto existe. (De fe divina, expresamente definida).

11. Consta expresamente por:

a) LA SAGRADA ESCRITURA. He aquí algunos textos del todo claros y expresivos:

"Vanos son por naturaleza todos los hombres que care- cen del conocimiento de Dios... , pues de la grandeza y hermosura de las criaturas, por razonamientos, se llega a conocer al Hacedor de éstas" (Sap 13, 1-5).

"...no son excusables, porque si pueden alcanzar tanta ciencia y son capaces de investigar el universo, ¿cómo no conocen más fácilmente al Señor de él?" (Sap 13,9).

"Porque desde la creacn del mundo, lo invisible de Dios, su eterno poder y su divinidad, son conocidos mediante las criaturas. De manera que son inexcusables" (Rom. 1,20).

c)    EL MAGISTERIO DE LA IGLESIA.
Lo enseñó siempre así y lo definió expresamente el Concilio Vaticano I en la siguiente forma:

"Si alguno dijere que el Dios uno y verdadero, Creador y Señor nuestro, no puede ser conocido con certeza por la luz natural de la razón humana por medio de las cosas que han sido hechas, sea anatema" (D.1806).




e) LA RAZÓN TEOLÓGICA.


Como veremos en el capítulo siguiente, por vía de rigurosa causalidad, o sea, partiendo de las cosas creadas y remontándonos a la Causa Primera de la que proceden todas ellas, puede demostrarse con toda certeza la existencia real de Dios como Creador y Señor de todo cuanto existe. 

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